Construir innovando — Reto Salud Mental CChC GDS
Gensalud: salud mental en construcción
Durante el semestre, se ha ejecutado el Construir innovando — Reto Salud Mental de la Cámara Chilena de la Construcción, donde GDS Empresa Social, ha trabajado en el área de acompañamiento, mentoría y formación.
Gensalud es una de las seis empresas que está implementando un sistema de atención psicológica en obra y vía telemedicina en las regiones de Valparaíso y Magallanes, con foco en los trabajadores y trabajadoras de las obras de las constructoras Ramco y Salfa. Por ello, conversamos con Boris Rodríguez, representante de la organización, para conocer cómo ha sido su experiencia en la implementación del piloto.
¿Cómo ha sido el recibimiento en la obra?
En ambas regiones hemos visto mucho entusiasmo por nuestro piloto. Desde el primer momento dispusieron lugares para poder realizar las atenciones, personas y materiales para operar en obra. Siempre hay alguien que nos acompaña para poder contactar más rápido a los trabajadores por radio. También influyó que los socios estuvieran en conocimiento de nuestro proyecto, por lo que al llegar terreno ya nos conocían.
¿Qué ha sido lo mejor de la implementación del piloto?
Nosotros nunca pensamos que habría tanta voluntad de parte de los trabajadores de participar en algo relacionado a salud mental. Tuvimos dos instancias de convocatoria y pese a qué en un principio hubo comentarios de burla entre ellos, se llenaron todos los cupos voluntariamente, lo cual es muy distinto a que uno vaya y los obligue, eso ha sido lo mejor.
¿Qué barreras han enfrentado en la implementación y cómo lo solucionaron?
Nos ha costado el tema de las distancias y el internet en Magallanes, por ejemplo, la obra está partiendo entonces, nos hemos tenido que adecuar para ser un aporte dentro de la obra.
Por otra parte, nos ha sorprendido lo cambiante que puede ser una empresa respecto de la continuidad de los trabajadores en la obra. Estas situaciones (como los despidos) nos han llevado a reagendar las actividades que teníamos planificadas para el proyecto porque no es favorable la discontinuidad de la atención en este caso, porque eso puede cambiar la relación que tenga esa persona con la terapia. Por eso, hemos decidido que en esos casos vamos a seguir con las atenciones vía telemedicina desde sus casas.
¿Cómo ha cambiado su percepción del ambiente de la construcción ahora que están en terreno?
Nosotros imaginábamos que íbamos a tener una sala particular para realizar las atenciones. En la obra todo es muy distinto. Hay horarios específicos donde los trabajadores pueden salir o a veces a algunas personas les cambian sus actividades del día y están solo durante la mañana. Entonces, debemos estar adecuándonos con la psicóloga por esas situaciones que no identificamos desde un principio y han sido parte de los aprendizajes obtenidos.
Por otra parte, algo que sí teníamos en cuenta, pero que no pensamos que tendría tanta repercusión en los trabajadores es el hecho de que se están atendiendo en una obra. Ellos saben que no están en un hospital, están en el trabajo y para disminuir o evitar sentimientos de desconfianza o estrés, desde la primera atención nos hemos asegurado de cumplir con la privacidad de las atenciones, parte de uno de los derechos que tiene cada paciente.
¿Qué les ha llamado la atención de trabajar en dos obras de regiones distintas?
Es importante destacar que por más que exista una distancia considerable entre ambas regiones, y que según los estudios, la calidad de vida sea mejor en Magallanes, se presentan patologías psicológicas similares y necesidades educativas base.
Lo positivo de estar en ambas regiones, es que las características en obra al ser similares podemos ir adelantando obstáculos que vamos viendo en una u otra región y de esta forma anticiparnos y favorecemos las atenciones.
¿Han visto cambios dentro de la obra?
El recibimiento es totalmente distinto al que teníamos en un inicio. Ahora qué nos conocen los trabajadores nos hablan y nos mandan mensajes con la administración. Todo lo que hemos recibido son mensajes de agradecimiento, están muy contentos. Dos personas ya están con alta psicológica, porque tenían una necesidad específica que se abordó en las primeras sesiones. Todos los demás están muy motivados. En una de las regiones, tuve la oportunidad de quedarme después de las atenciones para recibir algún tipo de feedback de los trabajadores y ellos se daban el tiempo de salir a conversar con nosotros. Me explicaban que era un espacio que necesitaban porque con sus familias y amigos no tienen algo así, y ahora, tienen a un psicólogo para poder hablar lo que no le cuentan a nadie.
Además, de la experiencia en la región de Magallanes, la iniciativa resalta la importancia de integrar a todas las personas de la obra en cada una de las intervenciones. “Intentamos hacer la charla de la convocatoria a todas las personas, pero pasó que un auxiliar de aseo se acercó a nosotros. Él no sabía leer ni escribir y llevaba muchos años trabajando en estas obras. Le comentamos del piloto y se motivó a participar. Creemos que es fundamental la participación de todo el personal de la obra, no solo de los trabajadores. Hay que incluir a los administrativos, hasta los auxiliares, aunque sean externos”, explica Boris Rodríguez.
